Se han visto perjudicados con punto Iberia, Deportes Valdivia, General Velásquez y Real San Joaquín.
Sin lugar a dudas ha sido un año polémico en la Segunda División, se ha visto empañado por denuncias de un lado a otro y acusaciones que terminan en lo judicial.
En abril de este año fue la primera polémica del torneo, tuvo que ver con General Velásquez, tras la mala inscripción del jugador Pablo Corvalán, juvenil que estaba incluido en la convocatoria pero no se encontraba habilitado para participar en el campeonato. Esto le costó al equipo «militar» la resta de 3 puntos.
El mes siguiente fue el turno de Iberia, en donde debía pagar la garantía de $50 millones para poder competir en Segunda División, al no presentar esta cifra en el plazo establecido el Tribunal de Disciplina de la ANFP le descontó 3 puntos al equipo angelino, quedando ya al borde del descenso en ese entonces, situación que no pudo revertir.
Real San Joaquín también sufrió consecuencias por no haber presentado las cotizaciones previsionales de cesantía y de salud respecto de las remuneraciones de marzo, lo que significó un descuento de 3 puntos.
Ahora, en octubre fue Deportes Valdivia quien se vio perjudicado tras la resta de 6 puntos anunciado por el Tribunal de Penalidades de la ANFP por denuncias de la Unidad de Control Financiero, con esta sanción los «valdivianos» se vieron altamente perjudicados, terminando con el descenso de categoría.
También hay acusaciones recientes contra Deportes Limache por «pagos en negro», dobles contratos, sobrepasarse del limite salarial, entre otras cosas.
A su vez, el cuadro melipillano también fue acusado por Fernández Vial por «pagos en negro» y «falsear» información entregada a la ANFP.
Estas denuncias y acusaciones son la tónica de lo que ha sido este torneo durante el 2023, aún quedan veredictos de lo que dictamine el ente judicial, sin embargo, lo que se sabe con certeza es lo común que se ha vuelto cometer irregularidades en el fútbol chileno.
